¿Qué es el Síndrome de Alimantación Nocturna?

El síndrome de alimentación nocturna es un nuevo trastorno alimenticio que afecta al 2% de la población, aquí te contamos todo lo que debes saber sobre él.

De qué trata

El también llamado Síndrome de Ingesta Nocturna de Alimentos, trata de un trastorno donde la persona tiene episodios donde interrumpe su sueño y despierta para comer de manera consciente, es decir, la persona no es sonámbula mientras lo experimenta.

Hasta hoy en día, este síndrome no se puede atribuir a otro trastorno.

Los estudios varían y aún la causa se desconoce, pero se cree que este síndrome es más común en mujeres (66%) y que se manifiesta durante la adultez temprana, al rededor de los 39 años de edad.

Se ha observado que las personas con mayor índice de masa corporal son más propensas a desarrollar éste síndrome, también puede manifestarse en la población general, sin embargo es menos frecuente que suceda.

Características

Algunos criterios que expertos toman en cuenta para identificarlo, son:

Anorexia matutina: esto significa que las personas tienen poca hambre y casi no comen en la mañana o comienzan a sentir apetito hasta la tarde.

Hiperfagia nocturna: la población general consume más alimentos durante el día y durante la noche su consumo calórico es menor, en cambio, estudios señalan que los pacientes con el síndrome, consumen 56% de las calorías diarias después de la última comida, es decir, la cena.

Insomnio: se trata de un trastorno del sueño en el que la persona tiene dificultad para conciliar el sueño o presenta frecuentemente interrupción, que además se acompaña de la ya mencionada hiperfagia nocturna, donde el paciente se levanta en varias ocasiones para comer. En estos episodios la persona no solo se levanta para comer, sino que no puede dormir si no ha ingerido algún alimento.

Causas y tratamiento

Es importante mencionar que este síndrome se asocia frecuentemente con estadios depresivos; los médicos aún no están seguros de qué es lo que lo causa, sin embargo su tratamiento aún se encuentra bajo investigación. Algunos estudios demuestran que puede tener relación con problemas del ciclo de sueño y ciertas hormonas.

Recuerda que si sospechas tenerlo, te sugerimos siempre acudir a una valoración médica y psiquiátrica y vivir tu vida como tú la quieres.